top of page

WHO I AM?

    Ella un día se perdió, se perdió de si misma, no supo encontrarse, recordar quien era, quien fue todo este tiempo, no supo ver con claridad quien realmente le gustaba ser, que hábitos solía tener, que cosas solía pensar, cuales eran sus metas, sus sueños, sus ambiciones, los adjetivos que la definían y por qué. Se perdió en todo el sentido de la palabra, y sola no podía encontrarse.

    Él no tuvo ningún problema en hacer un mensaje, contándole como era Lucila, quien realmente era esa chica que estaba detrás de la pantalla del celular, mostrando como él si lo sabía, no lo iba a olvidar nunca, esta fue su conversación

—Ale, hablame—
—Eu ¿Que pasa? ¿Por qué? ¿Estas bien?—
—No, decime cosas lindas, haceme sonreír— dijo ella casi sin demostrar ánimo alguno
—Hoy recordé cuando te conocí, viste cuando un niño encuentra un juguete, de esos que le encantan y no lo sueltan mas? Bueno así, sos mi juguete que no se despega de mi, lo cuido, le hablo, jugamos, reímos, sonreímos y siempre juntos, no te pongas mal, hay muchas cosas lindas que ver—
—¿No me vas a soltar?—
—Nunca te vas a soltar de mi hermosa, nunca vas a tener esa opción, nunca me voy a alejar de alguien me hace tan bien como vos, que me hace tanta falta ¿Por qué me iría de lo que más amo en este mundo? ¿Por qué olvidaría el sentimiento más lindo que sentí? Nunca me pienso ir, quiero compartir todo con vos—
—Ale, ¿Yo soy alguien que vale la pena? ¿Quién soy? ¿Cómo soy? Ale, ya no se ni que me gusta—
—No tenes que olvidarte como eres, sos Lucila La Fuente, una chica maravillosa, a la que le encanta compartir con sus amistades, pasarla bien siempre, nunca quiso hacer mal a nadie, siempre buscó solucionar las cosas, ante todo, siempre prefirió seguir intentando a quedarse en el camino, nunca se quedo en el camino, ¿Te diste cuenta? ¿Por que lo haría ahora? Simplemente Lucila va a seguir, porque es mas fuerte que nadie, porque ella misma sabe que sola puede salir de todo, seguramente este cansada. Pero ama los desafíos, tiene sus metas claras, me dijo que quiere viajar, que le encanta conocer, explorar, mirar, sos tan maravillosa que no hay palabras para describirte, sos algo que no viene mas en esta generación, ni en las de antes, ni en ninguna, que nadie te haga creer lo contrario. Sos Lucila Lafuente, no te confundas, nunca te voy a dejar sola para que pases tus problemas, nosotros los vamos a superar. Solo hay que sonreír, ser positiva, positivos, juntos, como siempre lo fue una chica que esta detras del celular leyendo esto, que me enseñó a ser optimista, que todo va a salir bien. Nunca lo olvides—
—Me gustaría que vivieras acá, te necesito a mi lado—
—Quisiera estar ahí, acariciarte el cabello y susurrarte que todo estará bien, intento estar lo mas cerca que puedo, perdón. Te diría esto y muchísimas cosas más, ¿Querés que siga? Te amo Luci—
—No, está bien, estoy mejor gracias a la misma persona de siempre. Te amo muchísimo más Ale—

    No, no es una conversación sacada de un libro de una historia romántica ficticia, era él tratando de hacerle ver que no estaba perdida, que solo no podía abrir los ojos, no podía ver más allá de sus problemas, cada vez sentía que se hundía más.

"Es feo estar en una situación como esa, pero no se supera de otra forma que no sea siendo optimista, cosa que ella misma se lo enseñó, no podes dejar a medias tu intento de ser feliz, vas a salir adelante a luchar por tus sueños, siempre tendrás esperanza porque nunca estuviste sola en todo esto, y mas cuando son dos los que luchan por lo mismo Lucila" repetía Alejandro, como si estuviera hablando con ella en su mente, reflexionando sobre lo que habían hablado.

Simplemente mágica, es una historia que no se puede olvidar...

© 2018 by Alejandro Fernandez. Created with WIX
bottom of page